Mons. Ricardo Ezzati cumplió un año como Arzobispo de Concepción

1403_06.jpgUn profundo agradecimiento al clero de la Arquidiócesis y a todos los laicos y laicas expresó Monseñor Ricardo Ezzati, Arzobispo de Concepción, al celebrar el primer aniversario de la toma de posesión de la diócesis.

Monseñor presidió una eucaristía en el templo Catedral el jueves 13 de marzo, con asistencia de todo el clero y numerosos fieles que coparon la iglesia. Previo al inicio de la celebración, el presbítero Claudio Alarcón, párroco de la parroquia Nuestra Señora del Rosario, Florida, entregó el saludo especial de todos los sacerdotes de la Arquidiócesis.

“Antes de iniciar esta Eucaristía que es fuente y culmen de la vida cristiana y lo es también para nuestro ministerio sacerdotal, ya que de ella brota la gracia necesaria para vivir con fidelidad nuestro llamado al sacerdocio, quisiera, a nombre del clero de Concepción, tanto religioso como secular, expresar lo feliz que estamos por el don de su persona que Dios ha regalado a nuestra Arquidiócesis”, señaló.

Monseñor Ezzati, al iniciar su homilía, expresó: “Permítanme, en primer lugar, expresar una palabra de agradecimiento que viene de lo más profundo de mi corazón, a mis hermanos sacerdotes, a los diáconos permanentes que están aquí, rodeando el altar del Señor y celebrando esta Eucaristía junto al Obispo”.

Continuó: “Queridos hermanos, la presencia de ustedes, en la Iglesia Catedral es un signo muy claro, de comunión; un signo que como Presbiterio, junto con el Obispo queremos ser un signo de la Iglesia que vive en comunión con Jesucristo, para la gloria del Padre y para el servicio evangelizador de los hermanos”.

Junto con reiterar sus agradecimientos por la cercanía y oración, monseñor precisó: “Quiero expresar también un agradecimiento a todos mis hermanos y hermanos consagrados, consagradas, laicos, niños, jóvenes y adultos. Creo que la presencia de ustedes, en esta tarde, aquí, orando por su Obispo y pidiéndole al Señor las luces necesarias para que sea un buen pastor, reconforta mi camino y es también un signo muy hermoso de lo que somos como iglesia, aquí, en Concepción y en Arauco”.

Al término de la misa, los fieles lo aplaudieron largamente y monseñor despidió en las puertas de la catedral, a todos los asistentes, recibieron muestras de afecto y cariño.

Fuente: Comunicaciones Concepción