Valdivia: MJS finaliza actividades del año 2005

Valdivia, 21 diciembre 2005.
“Dos personas que nos han demostrado que la Fe sí puede hacer las cosas diferentes y que el amor siempre tiene la última palabra; dos amigos, que al partir, pueden mirarnos de frente y decirnos que en Valdivia han dejado todo los que son”. El final de actividades pastorales del Instituto Salesiano de Valdivia estuvo marcado por la emotiva y sentida despedida que los jóvenes brindaron al tirocinante José Toledo, y al director, padre Patricio Troncoso.ç

Con la celebración de la Navidad del MJS, las experiencias asociativas del Instituto Saleisano de Valdivia dieron fin a un año que se caracterizó por un trabajo sistemático y constante en todos los ámbitos de la vida de sus comunidades.

El viernes 16 de diciembre se realizó la celebración de la Navidad del MJS, actividad que al mismo tiempo dio fin al trabajo del año 2005. En esta oportunidad, con motivo de agradecer el año vivido y de entregar un mensaje de Navidad, el equipo ENE motivo la jornada con la representación del nacimiento del Señor, para dar paso a las palabras del Coordinador de Pastoral. Posterior a esto se realizó la entrega de pañolines del CDS, para todos los niños y jóvenes que promesaron en las distintas etapas el Sábado 10 de diciembre recién pasado.

Para finalizar esta actividad el MJS, por medio de los coordinadores de experiencia, dirigieron algunas palabras de despedida y agradecimiento al padre Director de la obra, quien acompaño a los jóvenes como Coordinador de Pastoral por 4 años y luego como Director por 2 años, y al hermano José Toledo, quien acompañó a los jóvenes 2 años, refiriéndose a ellos como “dos hombres, que con su alegría se han ganado el cariño de todos los que estamos presentes, y que nos han enseñado en más de alguna ocasión, que la amistad se prueba en los buenos tiempos, tanto como en los malos, dos personas que nos han demostrado que la Fe sí puede hacer las cosas diferentes y que el amor siempre tiene la última palabra, dos amigos, que al partir, pueden mirarnos de frente y decirnos que en Valdivia han dejado todo los que son…”