Con nuevos estatutos aprobados, Sergio Torres asume Rectoría de la UCSH

1801_1.jpgCuidar la comunidad universitaria, brindar un espacio para crecer como discípulos y misioneros de Cristo Jesús y consolidar la fundación de la casa estudios fueron las tres orientaciones que el P. Inspector y Gran Canciller Natale Vitali manifestó como su deseo para el nuevo período como Rector que inicia Sergio Torres Pinto en la Universidad Católica Silva Henríquez, y que asumió el jueves 17 de enero en una emotiva ceremonia celebrada en dependencias de las misma casa de estudios salesiana. El acto estuvo presidido por el Provincial y contó con la participación de representantes de la Inspectoría, de la Iglesia, de organizaciones amigas, autoridades e integrantes de la comunidad universitaria.

En los primeros momentos del acto se dio lectura a un saludo enviado por la Ministra de Educación, Yasna Provoste, en el cual señala: “mis felicitaciones al Señor Torres Pinto, y le deseo éxito en este nuevo desafío, estando cierta de su aporte a la educación chilena con miras a un Bicentenario con una mejor calidad en nuestra educación”.

En su discurso, el P. Inspector señaló tres tareas que a su juicio revisten especial significado respecto de la consolidación del plantel y dio a conocer la noticia de la aprobación de los nuevos estatutos: “Me refiero, primeramente, a la implementación de la nueva institucionalidad que se ha dado nuestra Universidad, la que entre otros elementos comportará dos organismos colegiados: una Junta Directiva y el Consejo Universitario. Esta nueva institucionalidad está recogida en nuevos Estatutos que, tengo el gusto de comunicarles, han sido aprobados por el Ministerio de Educación, con fecha 2 de enero del presente año, y promulgados por mí, el día 3, para entrar en vigencia el día primero de marzo de este mismo año”.

“Junto con echar a andar esta nueva institucionalidad –añadió- es necesario terminar el diseño y la implementación de los ajustes que, diversas evaluaciones de nuestra misma universidad y de la acreditación institucional, sugieren para la organización interna de nuestra Institución. Es un trabajo que la comunidad ha estado realizando en particular el año pasado, y que de algún modo complementará la renovada institucionalidad y que por eso merece toda nuestra atención y esfuerzo”, agregó el P . Natale.

“Las universidades –indicó el P. Inspector- van creciendo y consolidándose en la medida que desarrollan una cultura de autoevaluación y que se exponen a los procesos de acreditación. La acreditación institucional que estamos llamados a preparar y realizar, es sin duda una tercera y poderosa tarea que nos hará crecer en consistencia académica y en relación con el medio. Ella nos permitirá hacernos más conscientes de nuestras fortalezas y debilidades, y sentirnos, desde ahí motivados a seguir dando lo mejor de nosotros a esta Universidad, la Universidad Silva Henríquez, una universidad católica y salesiana, nuestra universidad”, puntualizó.

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1801_2.jpgLos desafíos del período

Luego de su profesión de fe, el Rector Torres señaló los principales desafíos a los cuales la UCSH se debe abocar: “una tarea de carácter interno y de gran relevancia será la instalación de una nueva estructura de gobierno universitario; la re acreditación de nuestra universidad, y consolidar una estrategia de desarrollo académico, que contemple el fortalecimiento de un cuerpo académico y de gestión competente y comprometido, a la par de una estrategia de crecimiento que nos permita diversificar progresivamente las áreas del conocimiento que hoy se imparten en nuestra universidad, para abrirnos a nuevas áreas del conocimiento y perfiles profesionales que nuestro país requiere”.

“Al realizar estos desafíos – agregó el Rector-, queremos hacerlo en articulación con el conjunto de la Familia Salesiana, con cuyas obras estamos llamados a desarrollar una alianza estratégica para el mejor servicio a la comunidad y sus jóvenes”, precisó.

Añadió que a este proyecto “estamos llamados todos quienes laboramos en la Universidad Católica Silva Henríquez, que como bien nos lo ha señalado el Gran Canciller es ‘nuestra’ Universidad, de todos aquellos que la sentimos nuestra casa y que más allá de nuestras legítimas diferencias, la estamos construyendo día a día con nuestra entrega y profesionalismo”.

Destacó que “pocas instituciones como la nuestra, alejadas del gran capital y del negocio de la educación, pueden mostrarse con el legítimo orgullo de ser entidades de vocación pública y social, de calidad académica probada y de un ideario educativo y social tan claros. Personalmente, estoy convencido del profundo sentido humanizador que puede llegar a poseer la tarea universitaria. En palabras de nuestro Cardenal Raúl, ‘la vocación del servicio de una universidad católica… no es otra que el servicio de la fe, de la esperanza y de la caridad cristianas,  al mundo, a la cultura’.  Este es nuestro proyecto común, este es el compromiso que hoy reafirmamos”.

La ceremonia culminó con una bendición a la comunidad universitaria realizada por el Vice Gran Canciller, P. José Lino Yánez.

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