Las comunidades educativas de Campvs College y el Liceo Manuel Arriarán Barros de La Cisterna vivieron durante este segundo semestre experiencias transformadoras junto a Fundación Don Bosco, reafirmando que la solidaridad no solo se enseña, sino que se vive, comparte y deja huellas profundas.
“El Campvs al patio” con sentido social
El Centro de Estudiantes del colegio Campvs College realizó el cierre de la campaña “El Campvs al patio”, que marcará un verdadero hito para el establecimiento.
Lo que comenzó como una iniciativa para renovar los aros de básquetbol del Patio Punitaqui en La Florida, terminó siendo una experiencia de comunidad, empatía y transformación.
Familias, profesores y estudiantes visitaron el espacio de la Fundación Don Bosco para compartir con los niños en una tarde de juegos, deporte y cariño.
“Lo que recibimos de ellos fue aún mayor: sonrisas, alegría y conversaciones necesarias que nos invitan a reflexionar y crecer juntos”, expresó la familia Angulo Torres (6°B).
“Este tipo de actividades les ayuda a crecer como personas”, comentó el profesor Jorge Zavala.
LAB: servicio que educa
Los estudiantes de 3° medio del Liceo Salesiano Manuel Arriarán Barros (LAB) también compartieron una jornada especial de voluntariado en la Residencia Familiar Silva Henríquez, donde conocieron la realidad de las familias que viven en el programa residencial de la Fundación Don Bosco.
Durante la visita, participaron en trabajos de pintura, actividades comunitarias y momentos de conversación que generaron un fuerte impacto en su formación.
“Fue una valiosa oportunidad para que nuestros estudiantes se sensibilicen con otras realidades y entiendan el valor de dar y acompañar”, señaló el P. Marcelo Rojas, Coordinador de Pastoral del liceo.
Aunque por razones de tiempo no pudieron terminar la pintura de la cancha, lo esencial se logró: un encuentro profundo que siembra conciencia y valores.
Ambas experiencias reflejan cómo el trabajo colaborativo entre instituciones educativas y la Fundación Don Bosco multiplica el impacto social y formativo.
Fundación Don Bosco agradece profundamente la entrega, alegría y espíritu solidario de ambas comunidades, convencidos de que un corazón que da, cambia un futuro.