Uldaricio Cárdenas: testimonio de la verdad del Evangelio

Representantes de la Familia Salesiana y Salesianos de Don Bosco despidieron al hermano coadjutor Uldaricio Cardenas el jueves 20 de junio.

La Misa de exequias en la parroquia Sagrada Familia de Macul fue presidida por el Vicario Inspectorial, P. Juan Bustamante

Concelebraron el P. Sergio Astorga, director de la comunidad de Macul; el P. Néstor Muñoz, Ecónomo inspectorial y hermanos salesianos de diversas comunidades religiosas.

Durante su homilía, el P. Juan expresó que: Uldaricio se caracterizó por su fidelidad a los votos de su profesión religiosa, a la asistencia permanente en el patio y ambientes donde se encontraban los estudiantes, cuidando las cosas de la comunidad y rezando el rosario todos los días”. 

“Damos gracias a Dios por haber dado a nuestra Congregación un hermano bueno, disponible, sencillo, quitado de bullas, trabajador hasta que sus fuerzas se lo han permitido”. 

“Bendito tú, querido Uldaricio, por haber escuchado la llamada de Dios a la vida austera y exigente de la consagración religiosa, por haber dado testimonio de la verdad del Evangelio, concluyó el Vicario. 

Al concluir la celebración, el P. Osvaldo Valenzuela, Secretario Inspectorial, entregó el saludo del Inspector P. Nelson Moreno, quien se encuentra fuera del país. 

“Me uno en la oración desde Roma para pedir por el descanso eterno de nuestro hermano Uldaricio. Que el Señor Padre bueno bendiga todo el trabajo y servicio que prestó a la Inspectoría. Que su pascua sea un signo de rebrotar la vocación laical de los coadjutores, expresó el Provincial. 

“Querido hermano Uldaricio, que el Señor te acoja y reciba en el paraíso donde hay un lugar para todo salesiano que entrega su vida en la misión de los jóvenes”, concluyó. 

Al término de la celebración, un sobrino de don Uldaricio dirigió unas palabras de agradecimiento. 

“Lo recordamos como una persona preocupada de su familia, comprometida con la Iglesia. Queremos agradecer a la Congregación Salesiana que lo acogió desde niño, formó, educó y permitió vivir su vocación religiosa como coadjutor”. 

FUENTE: Comunicaciones Salesianos Chile

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